El FMI redujo su pronóstico inicial de un 3,6% de crecimiento económico global realizado el pasado mes de octubre por un 3,5%. Del 4,2% estimado para el 2014 también se ha reducido a un tímido 4,1%. En 2012 el crecimiento se sitúo en un nivel del 3,2% aproximadamente.
Teniendo en cuenta este dato el pronóstico para este año puede resultarnos algo moderado pero es que actualmente los mercados financieros se encuentran por delante de la economía real y no está muy clara la distancia entre ambos. Se puede ser optimista pero hay que tener en cuenta que los mercados necesitan su tiempo para nutrir la economía.
Por lo pronto, economistas del FMI prevén una contracción en la economía de la zona euro del 0,2% durante el 2013. Actualmente la eurozona representa un riesgo importante para la economía a nivel mundial. No obstante, se estima que la situación mejorará y que a partir del 2014 apreciaremos un crecimiento del 1% en la economía de la zona euro.
Respecto al crecimiento económico en los Estados Unidos el FMI ha pronosticado un aumento del 2% en el 2013 frente al 2,1% estimado en octubre y 3% para el 2014, algo más en comparación con el 2,9% previsto anteriormente. Los políticos estadounidenses han garantizado que llegaran a un acuerdo para la consolidación fiscal a medio plazo, el cual se centrará en los subsidios y la reforma de impuestos.
Las estimaciones sobre la economía china no han sufrido modificaciones. La previsión de crecimiento para este 2013 es del 8,2% y del 8,5% para el 2014. El principal economista del Fondo Monetario Internacional ha declarado que aunque no sean los niveles a los que estamos acostumbrados en un país en constante crecimiento, con la crisis económica es prácticamente imposible alcanzar los niveles de aquel entonces. No obstante, hay que decir que estas previsiones no están nada mal.
En resumen, la situación de la economía a nivel global está estable pero hay que conseguir que continúe creciendo y no caiga. En palabras de la gerente del FMI Christine Lagarde, hemos conseguido parar el colapso, pero ahora tenemos que evitar la recaída y no es buen momento para relajarse. Por tanto, hay que seguir con este ritmo para impulsar de nuevo la economía.
En la última semana la mayoría de datos publicados en Europa, China y EE.UU han sido bastante positivos y esperanzadores. El aumento de los índices de gestión de compras (PMI) del mes de enero es un buen indicativo. Por otro lado, los sondeos sobre la economía europea muestran una notable mejora aunque cabe destacar que sigue habiendo expectativas de contracción económica en los próximos meses. Sin embargo, para tranquilidad de todos, esto ocurrirá a un ritmo bastante más moderado de lo previsto para el cuarto trimestre.
En referencia a lo más destacado de la economía mundial tenemos el aumento del techo de deuda de los Estados Unidos votado por el Congreso la semana pasada. Esto significa que el Gobierno podrá continuar funcionando hasta el día 19 de mayo. Por desgracia, el debate entre demócratas y republicanos no dejó nada en claro sobre el tema de los ajustes fiscales y esto podría aumentar fácilmente la inquietud de los mercados durante los meses venideros.
Sí de lo contrario finalmente los políticos estadounidenses no consiguen ponerse de acuerdo sobre los recortes presupuestarios automáticos tendrán que realizar recortes transversales de 100.000 millones de dólares a principios del mes de marzo más o menos.
En relación al Banco Central Europeo, el último anuncio se produjo el pasado viernes donde se comentó que el volumen de amortizaciones de deuda otorgadas en las subastas de las operaciones de refinanciación a largo plazo (LTRO) fue mayor de lo esperado. Por tanto, se puede confirmar que la liquidez del sistema financiero europeo fluye de manera positiva.
Por su parte, los bancos de Europa han pactado devolver al Banco Central Europeo 137.000 millones de euros de un total de 1,04 billones que el BCE prestó en dos subastas de LTRO en relación a las expectativas de 84.000 millones de euros de amortización.